domingo, 25 de octubre de 2015

Pavo en salsa de cerveza

Hola de nuevo.
Después de casi un año de ausencia regreso para aumentar este baúl con recetas de mis menús diarios.

Cuando el tiempo para cocinar no es mucho y los elementos de los que dispones no son bastantes, hay que adaptar las recetas más sencillas.

Un día no demasiado lejano, me hice con una oferta en la que se incluía carne de pavo para estofar, así que la cogí pensando en hacer el estofado de pavo de mi suegra que está buenísimo; pero llegado el momento de cocinar se me echó el reloj encima y tuve que improvisar otra preparación, que es la que os traigo. Pensé que el pavo no debía casar mal con una salsita de cerveza, y el resultado fue muy, pero que muy recomendable...tanto que ya ha sido incluida esta receta entre mis platos habituales.

Tenemos vídeo:

Y ahora la receta:

Ingredientes
 
1/2 kilo de pavo troceado (para estofado)
1 cebolla
2 dientes de ajo
1 lata de cerveza
1 vaso de caldo (o en su defecto pastilla de caldo y vaso de agua)
aceite de oliva
harina
sal

Preparación

Rebozamos los trozos de pavo en harina. En una sartén grande ponemos un par de cucharadas de aceite de oliva a calentar y doramos los trozos de pavo.

Mientras se realiza esta operación, vamos preparando las cebollas, pelamos, lavamos y picamos, y hacemos lo mismo con los dientes de ajo.

Una vez que los trozos de pavo están bien doraditos los sacamos del fuego y los reservamos, y en la misma sartén pochamos la cebolla y el ajo. Cuando la cebolla ya está bien hecha, incorporamos de nuevo el pavo y añadimos la cerveza, dejando que se reduzca casi totalmente el líquido.

Una vez reducida la cerveza añadimos el vaso de caldo y lo dejamos hervir todo junto a fuego lento unos diez o quince minutos, hasta que la salsa espese.

Y lo tenemos listo para comer, rápido, económico y buenísimo.

Truquillos

El plato se puede servir tal cual, pero si no te gusta encontrar los trocitos de cebolla (o tienes niños en casa que prefieran las salsas convenientemente trituradas) puedes pasarla por la batidora y se queda finísima.

El plato gana mucho acompañado de unas ricas patatas fritas, pero también va fenomenal con un poco de arroz.